Aprendió desde pequeña gracias a su madre que la inculcó a seguir este bello arte. Supo aprovechar los conocimientos heredados, y los implementó para salir adelante y sacar adelante a sus hijas, y una de ellas hoy es su voz ya que ella se comunica a través del lenguaje de señas.
Su hija comentó que ella se siente muy orgullosa de ser itagüeña y sueña con tener un negocio propio que se dedique a la venta de artesanías.
Hoy en día sus trabajos son admirados, pero sobre todo las increíbles ganas de Maria Teresa de seguir adelante trabajando en lo que tanto ama. Con la ayuda de su hija aprovecha el poder de las redes sociales para mostrar y vender su obra; en la que deposita dedicación, esmero y mucho amor.
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