Por medio de las redes sociales, se dio a conocer una conmovedora y motivadora historia que tiene como protagonista a don Cándido Silva de 87 años de edad, oriundo de La Paloma, departamento de Canindeyú, quien el día de ayer regresó al colegio.
A pesar de los obstáculos y su movilidad reducida, las ganas del adulto mayor fueron mayores para demostrar que todo se puede si uno se lo propone.
Con remera blanca bien planchada, short azul y championes impecables, don Cándido se lució el primer día de clases presenciales en la Escuela Básica N° 1.280 «San Francisco de Asís».
Según trascendió, una de las hijas del hombre cuenta con una librería, que en los últimos días recibió a gran cantidad de niños y sus padres para adquirir útiles escolares, lo que despertó interés en él para regresar al colegio y seguir aprendiendo.
A pesar de que su familia le ofreció enseñanza particular, don Cándido quiso sentir el calor y el bullicio de las aulas, y con mucho entusiasmo vivió su primer día de clases presenciales.
Sus compañeros del séptimo grado lo recibieron con todo el cariño y respecto, inclusive, posaron con él para una foto grupal, que, sin dudas, quedará en el recuerdo de cada uno.
En comunicación con medios locales, don Cándido mencionó que decidió retornar sus estudios para seguir adelante y recordó que, durante su niñez, cursó hasta el sexto grado en una escuela de Carapeguá.
El hombre vive actualmente con su esposa Virginia Chávez, pero su nieta Judith Santacruz es la que le acompaña a clases, ya que don Silva se maneja en silla de ruedas.
De esta manera, el hombre de 87 años dio un claro ejemplo de superación y determinación para todos los jóvenes.
