El medio digital The Drive publicó los informes del Centro de Seguridad Naval de Estados Unidos, tras acceder a ellos luego de presentar una solicitud de liberación de información. Son en total ocho nuevos informes catalogados como “no clasificados” y “solo para uso oficial”, entre los cuales se tienen más detalles de otros tres videos de ovnis revelados anteriormente por el Gobierno.
Según lo detallado por el medio estadounidense, la mayoría de los avistamientos ocurrieron en la costa de Virginia y Carolina del norte, un lugar denominado “zona de advertencia”, ya que es un espacio aéreo restringido para el entrenamiento militar. En siete de los ocho avistamientos estuvieron involucrados aviones caza F/A-18F Super Hornet y F/A-18E Super Hornet.
En uno de los avistamientos se detalla como el piloto del avión caza describió a un “avión de color blanco y aproximadamente del tamaño y la forma de un dron o misil”, el cual no fue detectado por el radar, pero si fue visto por los pilotos.
Otro incidente detalla como un piloto de la Marina “pudo ubicar visualmente una aeronave pequeña. La aeronave tenía una envergadura de aproximadamente 5 pies y era de color blanco sin otras características distinguibles”. “Debido al pequeño tamaño, se determinó que el avión era un UAS”, dijo el informe.
Uno de los documentos también describe un incidente en la cual “La aeronave desconocida parecía ser de tamaño pequeño, aproximadamente del tamaño de una maleta y de color plateado”, en el cual uno de los aviones de la Marina “pasó a menos de 1000 pies del objeto, pero no pudo determinar positivamente la identidad de la aeronave”. El piloto “intentó recuperar el contacto visual con la aeronave, pero no pudo”, detalla el informe.
Además, en los documentos se dan más detalles de tres videos que fueron publicados anteriormente por el Gobierno también catalogados como Ovnis. Según los informes del Pentágono, estos avistamientos podrían haberse tratado de drones tripulados a distancia, aunque los militares no pudieron determinar su origen ni quien las operaba.
Las autoridades detallaron que “después del vuelo, la agencia de control contactó a numerosos operadores locales de UAS (sistemas aéreos no tripulados, por sus siglas en inglés), pero ninguno afirmó tener conocimiento” de la aeronave, alertando posibles colisiones con los aviones, “siento que puede ser solo cuestión de tiempo antes de que uno de nuestros aviones F / A-18 tenga una colisión en el aire con un UAS no identificado”, explicaron en el informe publicado.