El Decano se jugó la vida en la Copa Libertadores en la tarde de este miércoles.
El equipo de Órteman, que necesitaba convertir cuatro goles para avanzar a Octavos, terminó goleando 6-2 al Deportivo Táchira.
En un partido no apto para cardiacos, Olimpia se metió entre los 16 mejores equipos de la Copa Libertadores de América.
El Decano, que entró con el único objetivo de ganar, tuvo que sufrir para lograr una victoria épica e inolvidable. El equipo de Sergio Órteman tenía que superar por cuatro tantos de diferencia al cuadro venezolano, y así lo hizo, no sin antes vivir varios sofocones.
El primer gol esperanzador llegó a los 25 minutos por intermedio del capitán Richard Ortiz, quien se encargó de prender la ilusión franjeada y comenzar la lucha por la clasificación.
Con alma y vida, el Decano salió a buscar más tantos y fue así que, a los 31 minutos, con un golazo de Hugo Quintana, se acrecentaban las esperanzas.
Olimpia fue al vestuario tranquilo, mentalizado y con fuerzas para retomar la etapa complementaria. El segundo tiempo fue clave para los franjeados, que sufrió, peleó y nunca se rindió.
El tercer tanto llegó a través de un penal, que se encargó de convertir Derlis González. Con mucha categoría, puso el 3-0 a favor de Olimpia.
Sin embargo, el camino se tornó difícil para el Decano tras el gol a los 61 minutos del Táchira; obligando al franjeado a marcar un dos goles más.
Por el contrario, el salvador fue Isidro Pitta, quien se encargó de dar a Olimpia los goles que necesitaba. El primer tanto lo hizo a los 70 minutos y el segundo, un minuto más tarde, a los 71 minutos (5-1).
Pero la ilusión franjeada se vino abajo a los 76 minutos, cuando el Deportivo Táchira marcó su segundo tanto (5-2), dejando al equipo de Órteman fuera.
Hasta que apareció su capitán Richard Ortiz, quien logró el sexto y definitivo gol para sellar la clasificación a octavos de final de la Copa Libertadores.
