Ante la adquisición de un nuevo préstamo de US$ 350 millones, en el marco del plan de reactivación económica del Poder Ejecutivo, el economista Santiago Peña indicó que preocupa que el Gobierno esté solicitando créditos para gastos rígidos. Además, precisó que en dos años se elevó la deuda del país al 30% del Producto Interno Bruto (PIB) sin establecer un plan de recuperación de las finanzas a futuro.
Señaló que ya el año pasado fue superado el déficit fiscal permitido de 1,5%, y fue elevado al 3%, por lo que calcula que este 2020 se llegará a un déficit fiscal del 7%, considerando todas las maniobras económicas llevadas a cabo a raíz de la pandemia de Covid-19.
Por estos motivos, pide a las autoridades comprometer esfuerzos en la eliminación de gastos superfluos del Estado, firmeza para luchar contra la corrupción y por, sobre todo, lograr una mejor gestión pública.
“Hay que hacer un esfuerzo de disminuir el gasto corriente para darle más espacio a la inversión pública. Que vuelva a crecer la economía, y que la deuda vuelva a un 24-25% que era lo razonable. La pregunta es, ¿cuál es el camino hacia delante, como nos vamos a comportar?”
Santiago Peña reconoció que el mundo atraviesa una crisis económica sin comparación, por lo que insistió en no endeudar más al país. En cambio, sugiere apoyar a las Mipymes, y que el financiamiento sea efectivo para proteger el empleo, generar confianza del sector privado para lograr inversiones, formalizar trabajadores, y exigir mayor eficiencia al Banco Nacional de Fomento.
