Desde el inicio de la pandemia surgieron nuevas preocupaciones y angustias diferentes a las que usualmente tenemos. Esta situación puede generar cambios en el comportamiento y un desgaste físico y mental.
Existen ciertas características de un comportamiento particular que, según la psicología popular, se atribuyen a los “vampiros emocionales”.
Al respecto, la licenciada Ruth Villalba, psicóloga del departamento de Psicología del Hospital de Clínicas, explicó que los conocidos como “vampiros emocionales” son individuos que de forma consciente o inconsciente absorben la energía y el ánimo de las personas a su alrededor.
“Son aquellas personas que constantemente crean una atmósfera de negatividad. Este tipo de personas va creando una interacción desgastante, ya sea en el trabajo o en el lugar donde uno se encuentre. ¿Por qué decimos desgastante? Porque realmente van agotando y aislando a las personas y esto afecta seriamente a la salud física y también psicológica”, indicó la profesional.
Villalba aclaró que el término “vampiro emocional” no tiene el respaldo científico debido a que no existe un manual de diagnóstico que pueda establecer un protocolo para identificarlos. “Más bien es la psicología popular la que en este momento se está llevando a cabo este tema y se está interesando en la definición”, sostuvo la profesional.
Asimismo, la psicóloga cito algunas de las características de un “vampiro emocional” a fin de que las personas puedan alejarse de ellas.
Una de las principales características es la falta de empatía. Villalba contó que estas personas tienen muy poca o nula empatía. “Son personas que no están en condiciones de ponerse en el lugar de la otra persona. Es decir, ante situaciones que requieren una mirada humana, tienen cero grado de sensibilidad, de aprecio”.
La psicóloga mencionó además que los “vampiros emocionales” son muy egoístas, porque utilizan a la gente para sus propios intereses.
“También son muy críticos, ya que constantemente están en desacuerdo con lo que otras personas plantean. Siempre están diciendo o dando críticas muy duras, negativas acerca de la opinión o de la forma de manejarse de las otras personas, son críticos en el sentido negativo”, agregó Villalba.
De igual forma, sostuvo que las personas son pesimistas y no tienen una actitud vital positiva generalmente. “Ante cualquier situación siempre están esperando que ocurra algo catastrófico, están esperando que ocurra lo peor”, añadió.
Otra de las características es que “los vampiros emocionales se victimizan en toda situación. Siempre se colocan en el papel de la víctima y ante cualquier falla que se pueda encontrar en ellos, encuentran una excusa”.
“Constantemente están justificando sus malas acciones o su mal proceder. Siempre son ellas las víctimas. Además viven quejándose. Aprovechándose de las demás personas”, manifestó.
De igual forma, la profesional agregó que las personas “absorben nuestra energía y nos drenan la alegría, nos someten y podemos caer en el error de adherirnos a ese camino de desánimo que constantemente están poniendo en práctica”.
¿Qué hacer y cómo enfrentar a los “vampiros emocionales”?
La psicóloga explicó que “es muy importante en estos casos no caer en las redes de estos ‘vampiros’, no convertirnos en sus víctimas”.
¿Cómo podemos lograr esto? Villalba sostuvo que la alterativa está en el diálogo y siendo asertivos, expresando una postura de forma sincera y respetuosa en lugar de acusar a ese vampiro emocional.
“No aceptar todo pensando que así se evita crear conflictos. Se debe dialogar. Alejarse también es una buenísima opción, porque hay personas que por más que seamos comunicativos y asertivos, seguirán siendo como son y disfrutando haciendo daño y si aun así no funciona, es muy sano tomar distancia”, puntualizó.
Además, explicó que aprender a decir “no” es fundamental para hacer frente a la situación. “A esos vampiros emocionales que se alimentan constantemente de nuestra predisposición, que están ahí fingiendo, disimulando que son nuestros amigos o que necesitan den nosotros y simplemente buscan sacar provecho de nosotros”, refirió.
Por último, aclaró que estos “vampiros emocionales” están en todas partes como en el trabajo, el entorno y las redes sociales. “Muchos vampiros emocionales están buscando, atacando y absorbiendo nuestra energía y emociones positivas, entonces no tenemos que caer en el error de ser víctimas ni agresores, esta es la verdadera clave”, finalizó.
