Este miércoles, una comitiva del Ministerio Público acudió hasta la vivienda donde residía el niño desaparecido, José Ozuna, y verificó todos los sitios del lugar, ubicado en el barrio Republicano de Asunción.
Según comentó el cronista, Fernando Torres, los intervinientes no encontraron excavaciones recientes u otros indicios que levanten sospechas sobre cómo vivían con el menor, pero sí, todos los familiares fueron obligados a entregar sus teléfonos celulares para el proceso de investigación.
En ese marco, la fiscal Fátima Girala, confirmó la imputación de la madre del niño, Josefina Ozuna, por la “violación del deber del cuidado”.
El caso ya lleva consigo varias hipótesis que ponen foco al entorno familiar. Se habla de la posibilidad de tráfico de drogas, y que presuntamente, la desaparición de José sería como una “venganza” por parte de un “trato mal hecho”.
Por otro lado, también se presume que hay casos de abusos sexuales dentro del vínculo familiar y que incluso, hay personas que están privadas de su libertad por ello.
José Ozuna lleva más de 20 días desaparecido.