A partir de la medianoche, trasladarse más allá del departamento Central se convierte en un desafío para más de 20.000 usuarios, que se verán afectados por el inicio del paro de buses de corta, media y larga distancia. Los empresarios del transporte llevan a cabo la medida para exigir al Gobierno la reducción de G. 3.000 en los combustibles y la disminución de G. 2.000 en el impuesto al valor agregado para el sector.
Más de 60 empresas se plegaron a la medida, que contará además con la participación de conductores de plataformas y la adhesión de los camioneros, quienes prometieron apostarse a un lado de las rutas principales a fin de solicitar al Gobierno una estrategia para hacer frente a la suba de combustibles.
En la Terminal de Ómnibus de Asunción quedaron varados algunos de los usuarios afectados que, ante la imposibilidad de trasladarse, se encontraban buscando alternativas para llegar hasta su destino. Por ejemplo, el pasajero David Duarte, consideró incluso la posibilidad de rentar un minibus entre los demás clientes apostados en la estación.
“No avisaron nada. Acá lo que hay que hacer es recuperar el pasaje, juntar todo y hacer como una ‘vaquita’ y ahí ver cómo hacer. Si perdés el viaje, perdés tu vuelo. Acá hay gente que tenía que trasladarse hasta Foz de Iguazú para embarcar un avión”, relató.