Los fiscales de Anticorrupción Rodrigo Estigarribia y Francisco Cabrera se constituyeron este martes en las oficinas de Informática de la Policía Nacional en el marco de las investigaciones por el borrado de datos de una orden de captura internacional contra José Luis Bogado Quevedo.
Al respecto, Estigarribia dio detalles sobre el allanamiento en las oficinas de informática y mencionó que “lo que hizo el agente es una modificación de un registro; no se suprimió ningún dato. Hay varias aristas que vamos a investigar”.
“No se borró nada ya que todo está dentro del sistema. Se sobrescribió y quedan registros”, añadió el representante del Ministerio Público, quien manifestó que “cada usuario es responsable de su actividad, no es que hay una cadena. Acá no se descarta ninguna hipótesis”.
Finalmente, detalló que citarán al suboficial para una declaración. “Ya solicitaremos las auditorías correspondientes, hay que ver si fue un caso aislado o no”, expresó Estigarribia.
Por su parte, el suboficial Ramón Vargas Espinoza, del Departamento de Informática de Ñeembucú, admitió haber borrado la orden de captura contra Bogado en abril del año pasado y sostuvo que fue “por error”.
No obstante, lo que llama la atención es que el agente se percató de la gran negligencia justo después de la tragedia en San Bernardino y la mediatización del caso.
Cabe mencionar que José Bogado resultó herido de bala junto a otras tres personas en el atentado ocurrido en un concierto musical en San Bernardino, donde murieron dos personas.
El herido, presunto narcotraficante, fue trasladado este martes a la Agrupación Especializada, en el barrio Tacumbú, tras permanecer internado en un sanatorio privado.