Una situación insólita y muy dolorosa se registró en Hernandarias, departamento de Alto Paraná, cuando Crecencia Bogado de 68 años, quien estaba siendo velada por sus familiares, dio signos de vida en su propio funeral.
Según el testimonio de los familiares, debido a la gravedad de su estado de salud y tras dar positivo al covid-19, la mujer fue derivada desde el Hospital Distrital de Hernandarias hasta el Hospital del Trauma de Ciudad del Este.
Crecencia fue dada por muerta el miércoles a las 14:30. Los hijos de la fallecida indicaron que el certificado de defunción fue firmado por el Dr. Rafael Barrail y mencionaron que su madre padecía de cáncer de pulmón y que hace unos días los profesionales indicaron que tenía coronavirus.
Sin embargo, cuando la mujer estaba siendo velada por sus familiares en su vivienda, los hijos observaron signos de vida en su madre por lo que decidieron llamar al médico de un puesto de salud, el doctor Ronald Escobar quien constató que Crecencia tenía presión y su corazón estaba latiendo.
Los familiares se vieron sorprendidos tras la noticia y, ante la falta de ambulancia, derivaron a la mujer en un automóvil, nuevamente hasta el Hospital Distrital de Hernandarias donde al mediodía se confirmó el deceso de la misma.
