Nazareno Martín Rovegno Arese, un joven de sólo 16 años y de nacionalidad argentina, falleció el 15 de junio pasado durante la explosión de un camión cisterna transportador de GLP, cuando lo estaban soldando en un taller mecánico de Villa Elisa. En la oportunidad, el hermano del menor, también de nacionalidad argentina, resultó gravemente herido.
El abogado querellante, Federico López Moreira, indicó que hasta el momento, no hay avances en la investigación del caso por parte del Ministerio Público, y que sólo el propietario del taller está imputado por homicidio culposo.
Por este motivo, el abogado anunció que la familia Rovegno solicitará a la Embajada Argentina que interceda, a fin de solicitar los informes pertinentes del caso y exigir una celeridad de la investigación sobre la muerte del menor.
Sostiene que lo sucedido fue un siniestro provocado, por lo que se configuraría como homicidio doloso. “Acá no hay odio ni rencor, pedimos justicia y que la cadena de responsables esté tras las rejas, porque o sino esto volverá a ocurrir”, sostuvo.
El abogado López Moreira indicó que a más del menor fallecido, otras 6 personas resultaron gravemente heridas durante la explosión del cisterna, y recalcó que sólo el propietario del taller está imputado, cuando que también deberían estarlo el conductor, el propietario del camión, y el jefe de seguridad de Petropar.