En un esfuerzo por fomentar la reinserción social de personas privadas de su libertad, la Penitenciaría Regional de San Pedro ha logrado proporcionar oportunidades educativas a 110 internos, de los cuales 102 son hombres y 8 mujeres, quienes continúan sus estudios básicos en la cárcel. Este programa educativo es posible gracias al trabajo conjunto de 8 docentes y 4 voluntarios que brindan clases los días lunes, miércoles y viernes.
Más de cien internos continúan sus estudios en la Penal de San Pedro. Foto: Web
El Ministerio de Educación y Ciencias, en colaboración con el Ministerio de Justicia, ha establecido un convenio que permite la enseñanza en esta institución penitenciaria. Este esfuerzo conjunto demuestra un compromiso con la educación como herramienta fundamental para la rehabilitación y el desarrollo de habilidades en un entorno de aprendizaje inclusivo.
Entre las historias destacadas en este programa se encuentra la de Adán David Aponte, persona privada de su libertad, quien se desempeña como voluntario, demostrando su compromiso con la educación y la oportunidad de crecimiento personal.
«Para poder reinsertarnos nuevamente a la sociedad porque no tuve la oportunidad cuando estuve afuera y culminar mis estudios y desde el 2017 soy voluntario con las profesoras. Quiero seguir avanzando en mis estudios para ser alguien en la vida», señaló.
Por otro lado, Manuel Simiano, también persona privada de su libertad, se destaca como un alumno ejemplar que demuestra el valor de la educación en la búsqueda de una segunda oportunidad.
«Nos da una oportunidad de aprender un poco más. Por lo menos para mí, cuando salga en libertad para enseñarle a mis nietos, ahora estoy culminando mi primaria», expresó.
La docente de la cárcel, la Profesora Adriana Recalde, es una figura clave en este proceso educativo, guiando y apoyando a los internos en su camino hacia la adquisición de conocimientos y habilidades.
«Estamos por el Ministerio de Educación y Ciencias por el convenio que tenemos con el ministerio de Justicia para trabajar en la reinserción de estas personas privadas de Libertad. Hasta el momento tenemos 110 prematriculantes», afirmó.
Es importante resaltar que, actualmente, la Penitenciaría Regional de San Pedro alberga a 1530 personas privadas de su libertad, entre condenadas y procesadas. Este programa educativo representa una luz de esperanza en medio de un contexto desafiante, brindando a los internos la oportunidad de transformar sus vidas a través de la educación y la preparación para una eventual reintegración a la sociedad.
