A pesar de que unos minutos de sol permiten absorber mayores cantidades de vitamina D, se debe tener precaución y evitar la exposición entre las 10:00 y 17:00, consideradas horas pico de calor.
Desde el Ministerio de Salud advirtieron que la exposición inadecuada a los rayos del sol puede generar quemaduras, golpes de calor, que pueden llevar al desvanecimiento, incluso predisponer al desarrollo de cáncer de piel.
Igualmente, puntualizaron que el sol es un agente externo que puede envejecer la piel de manera prematura, la radiación ultravioleta UV produce daños en el cutis, daña de colágeno y la elastina de la dermis, lo que desemboca en arrugas.
Embarazadas y el sol
Profesionales de salud explicaron que el calor influye en demasía en el embarazo y tiene consecuencias físicas en la embarazada.
Asimismo, puede influir en el bebé e incluso hacer que el momento de parto se adelante. Por tal motivo, es importante que las embarazadas tomen las debidas precauciones ante la ola de calor.
“Las altas temperaturas hacen que se contraigan los vasos sanguíneos como método de enfriamiento. Por eso, a muchas personas se les hinchan los pies. Algo mucho más visible en las embarazadas, ya que su temperatura interna aumenta durante la gestación”, detallaron.
En otra línea, puntualizaron que el intenso calor puede convertirse en una situación de riesgo cuando se produce el golpe de calor, que tiene lugar ante el aumento de la temperatura corporal a 39° C.
Esto puede ser detectado en la embarazada mediante la piel enrojecida y seca, pulso acelerado y dolor de cabeza, mareo, vértigo y vómitos.
Por tal motivo, la cartera sanitaria insta a acudir de inmediato a un centro asistencial ante cualquiera de estas señales.