Para el exministro de Planificación, José Molinas, los dos primeros años de Gobierno de Mario Abdo Benítez, estuvieron marcados por decisiones que no tuvieron en cuenta elementos fundamentales para la generación de políticas públicas en el área social, como lo son:
– Un sistema de información basado en evidencia. Se descontinuó la aplicación de la “ficha social” que hasta el 2018 esquematizó la situación de pobreza en el 60% de la población rural, donde se concentra el porcentaje mayor de pobreza y pobreza extrema.
– Espacios de capital social. Estos, según el profesional, tampoco fueron aprovechados debidamente. El Equipo Nacional de Estrategia País ENEP, compuesto por referentes del área productiva, social y académica, así como los 232 consejos municipales, permanecen inactivos. El Gobierno nunca más los convocó desde que asumió.
– La formalización de los trabajadores independientes, a partir de los programas de transferencias del Estado.
Sin estos componentes institucionalizados, sumados a la crisis generada por la pandemia y la consecuente paralización de la economía, el actual Gobierno está encaminado a enfrentar un duro golpe con el inminente aumento de la pobreza a nivel nacional entorno al 4%, advirtió.
José Molinas recordó que actualmente “el nivel de pobreza en nuestro país está alrededor del 24%. En el área rural es definitivamente mayor, es decir, el 23% y en el área urbana del 17,5%”, expresó.
Adelantó que la crisis capaz se sienta de manera más acentuada en la zona urbana, que crecería aproximadamente un 5%, en tanto que en la rural crecería de 3 a 4 puntos.
Otra herramienta citada por el exministro que no está siendo utilizada, es la Encuesta Permanente de Hogares, que permite acceder a información semestral sobre la situación de pobreza. Sugirió utilizar estos datos, pero además actualizarlos, pues hoy en día no contiene datos sobre los ingresos del sector informal y el área rural.
