La Lic. Claudia Bernaola, Jefa del Dpto. de Rehabilitación de Lesiones Músculo Esquelética de la carrera de Kinesiología y Fisioterapia de la Facultad de Ciencias Médicas de la UNA, habló acerca de los dolores de la columna vertebral, uno de los motivos de consulta más frecuente en el consultorio de rehabilitación.
La profesional mencionó que el segmento cervical, es decir la zona del cuello, es una de las dolencias más atendidas en el centro asistencial. Asimismo, mencionó que los dolores cervicales afectan tanto a hombres como mujeres.
“En gran porcentaje de los casos, estas dolencias de origen cervical están relacionadas a los malos hábitos posturales, entre ellos, el uso excesivo de la tecnología, por ejemplo, estar sentado frente a la computadora en mala postura y por tiempo prolongado, hacen que se originen esas dolencias a nivel de la columna cervical”, explicó.
“Cuando hablamos de dolores de cuello, nos referimos a todos los músculos que rodean a la región, la zona de los trapecios, de los músculos escapulares, toda esa zona tiene un notable incremento de tensión, contribuyendo con el malestar que siente el paciente”, agregó la kinesióloga.
Sobre los factores predisponentes, la licenciada Bernaola indicó no ser siempre la causa de la dolencia, pero sostuvo que si la persona permanece en posición fija y sentada por mucho tiempo, la columna vertebral es más vulnerable a desarrollar cuadros de dolor.
“Por eso se recomienda modificar la postura con frecuencia, no permanecer sentados por periodos prolongados de tiempo y tratar de movilizar un poco la zona de los hombros para relajar los músculos del cuello”, dijo.
“Pausa activa”
La especialista recomendó a las personas que trabajan en oficinas la “Pausa activa”, que consiste en destinar un tiempo para movilizar el cuerpo. Por ejemplo, levantarse de la silla y realizar movimientos circulares con los hombres, de ascenso y descenso, movimientos circulares hacia atrás y adelante, y de inclinación de la cabeza de un lado hacia el otro.
“Lo importante en esa automovilización que el paciente realiza es que tiene que ser suave, estar bien sentado o parado con buena postura y sin movimientos bruscos que puedan llegar a traumatizar la región cervical”, enfatizó la licenciada.
Al ser consultada sobre la contractura de cuello o lo que coloquialmente llamamos “me sopló viento”, dijo que, muchas veces, ese espasmo muscular es una respuesta a un movimiento brusco o a un vicio postural.
No obstante, advirtió que si a ese espasmo muscular se le suma un dolor irradiado y hormigueo en el brazo, es mejor recurrir a un especialista que evaluará y solicitará estudios para determinar cómo está el disco intervertebral o las raíces nerviosas y, de esa manera, determinar si existe otro problema.
Por otra parte, manifestó que el sobrepeso siempre trae aparejado una serie de modificaciones en la mecánica corporal. “Si bien no hay una relación directa, el sobrepeso predispone a dolencias articulares y la región cervical es una de ellas. Estas dolencias tienen una etiología multifactorial, es decir, son muchas las causas y no se pueden asociar directamente”, finalizó Bernaola.
Es importante recordar que el Hospital de Clínicas brinda atención de lunes a viernes de 7:00 a 12:00 y los interesados deben solicitar un turno en la secretaría de Kinesiología.