La bajante de los ríos Paraguay y Paraná afectó al 70% del comercio exterior que se mueve por la hidrovía. Los costos de logística aumentaron a causa del fenómeno y, en consecuencia, los del activo.
Según explicó Nikolaus Oswin, director de Inteligencia Competitiva de Riedex, en todo el 2020 se exportó soja por 1.767 millones de dólares, lo que representó 5.3 millones de toneladas.
Mientras de enero a octubre de este año se alcanzó 2.081 millones, que equivalen a 4.4 millones de toneladas.
Sobre la bajante, Oswin sostuvo que “afectó negativamente para el volumen de exportación, pero los precios más altos favorecieron para que no haya pérdida”.
Asimismo, explicó que aglomerando a todos los combustibles, de enero a octubre del 2020, se importó a un precio promedio de 503 dólares por tonelada. Mientras que en el 2021 a 664 dólares, con un aumento del 28%, es decir 141 dólares.
“El buque tiene el mismo precio si va a media carga o lleno, la bajante ocasiona que no se pueda cargar todo”, detalló el director, quien sostuvo que otro sector muy afectado fue el de la importación de fertilizantes, que influyó en los gastos del campo.
Según Datos de la Dirección de Aduanas, de enero a octubre de este año, se exportó, por vía fluvial, por un valor de 4.878 millones de dólares, que corresponde al 58,3% del total. Mientras que se importó 3.492 millones de dólares, que asciende al 30%.
