El fiscal Alfredo Acosta Heyn formuló imputación contra Rafael Esquivel, alias “Mbururú”, y 17 indígenas que habrían sido responsables del ataque a un establecimiento agrícola en el distrito de Itakyry, Hernandarias.
De acuerdo al informe fiscal, los sindicados, que estaban fuertemente armados, presuntamente redujeron a los propietarios, luego incendiaron plantaciones y maquinarias. Además, sacrificaron animales y perpetraron saqueo en el lugar.
Los 17 nativos procesados son: Eduvigis Benítez Vargas, Jorge Ramón Jara Franco, Héctor Jonás Gauto, Armando Moisés Gauto, Juliano Goncalves, Diego Goncalves Díaz, Milciades Benítez Benítez, Lidio Rojas Soria, Fabio Waldemar Díaz Martínez, Lorenzo Díaz Martínez y Cristóbal Gauto Tapari.
Igualmente, Juan Ignacio Gauto, Milciades Rojas Medina, Lorena Goncalvez Díaz, Juan Ignacio Tapari, Edilson Esquivel Benítez y Rubén Julio Paniagua Vera.
Todos fueron imputados por los supuestos hechos punibles de homicidio doloso en grado de tentativa, lesión grave, coacción grave, toma de rehenes, robo agravado, producción de riesgos comunes, amenaza de hechos punibles, asociación criminal y coacción sexual y violación.
De acuerdo a los datos, el ataque se produjo el 20 de agosto alrededor de las 13:00 en un inmueble ubicado en la colonia “Chacore’i”, Tapé Yke, distrito de Itakyry.
En ese entonces, presuntamente “Mbururú”, Diego Gonzcalves y Lorena Goncalves encabezaron un grupo de aproximadamente 50 indígenas, de la localidad de Ka’a Poty, que atropellaron la propiedad ajena y redujeron a Pedro Rufino Torras Maldonado, su señora esposa Rosalina Romero de Torras, Francisco Leonardo Torras Romero, Carlos Torras e Inocencio Ramos.
Según la Fiscalía, los atacantes llegaron supuestamente armados con machetes, hachas, cuchillos, palos y honditas, y tomaron de rehenes a las víctimas, exigiendo que abandonen la propiedad.
Luego, supuestamente incendiaron una plantación de camerún y un tractor de color rojo. Seguidamente, ingresaron hasta el tinglado donde prendieron fuego a una máquina sembradora y una fumigadora.
Asimismo, se habrían apoderado de herramientas de granja (desmalezadora, motosierras, machetes, azadas y hachas, entre otros).
Luego, derribaron el portón del tinglado y ocasionaron daños materiales en la casa, destrozando electrodomésticos y enseres. Igualmente, procedieron a la matanza de animales de corrales, como conejos, gallinas y cerdos.
Tras ser alertados del ataque, policías acudieron hasta el sitio. El subcomisario Bruno Vega trató de dialogar con los nativos, quienes en todo momento demostraron una actitud violenta.
Más tarde acudieron refuerzos de diferentes reparticiones policiales, por lo que los supuestos atacantes se dieron a la fuga.
Tras el hecho, las víctimas radicaron la denuncia y sindicaron como autores a los indígenas que están acampados en la propiedad del ciudadano Abel Simoe de Almeida.
En tan sentido, señalaron como cabecillas a Rafael Esquivel, Diego Goncalves y Lorena Goncalves.
Considerando la gravedad de los hechos, el Ministerio Público ordenó que todos los detenidos guarden prisión preventiva.