En lo que va de este 2022, se registraron 20 feminicidios y solo en las últimas semanas, 6 mujeres fueron asesinadas, según datos del Ministerio Público. La edad de las víctimas es de 16 y 52 años, mientras que los feminicidas tienen entre 19 y 65 años. En la mayoría de los casos, los asesinos eran exparejas de las víctimas.
Esta situación alarmante deja familias enteras enlutadas, destruidas y menores huérfanos. Según los datos, 17 de las víctimas eran madres, quienes dejaron 42 huérfanos, de los cuales 29 eran menores de edad.
Otro de los datos refiere a que la mayoría de los crímenes se producen en el departamento Central, específicamente en la vivienda de la víctima y la mayoría de los asesinos utilizó un arma de fuego o un arma blanca para perpetrar el crimen.
Ante estos preocupantes números, Liliana Zayas, exministra de la Mujer, expresó que se necesita un cambio radical y empezar a desaprender el “lenguaje que justifica y tolera la violencia y cuestiona a la mujer por qué no denunció”. “La carga de la denuncia no puede estar en la mujer, la sociedad se debe involucrar, la sociedad es quien debe denunciar cuando advierte estos hechos de violencia contra las mujeres en sus distintas formas”, puntualizó.
Lamentó que se siga llegando tarde y se siga dudando antes de tomar acciones ante un caso de violencia, para evitar que llegue a mayores. Sin embargo, no se puede negar que se da el caso de que muchas mujeres denuncian a sus agresores y terminan siendo víctimas de igual manera, por lo que se insta a que mejoren y hagan más efectivos los mecanismos que tiene la Justicia para resguardar a las mujeres que denuncian.
Actualmente, 15 agresores están imputados, mientras que 3 siguen prófugos y otros dos se quitaron la vida.