En un trágico accidente de tránsito, que se registró el fin de semana, una joven identificada como Diana Guerrero, de 34 años, falleció tras ser arrollada por un camión de gran porte.
La joven pertenecía al cuerpo de bomberos voluntarios. Cuando se trasladaba hasta el cuartel donde prestaba servicios en Mariano Roque Alonso, a la altura de la rotonda, la mujer perdió el control de su motocicleta y fue a parar contra las ruedas del transporte de gran porte que circulaba por la zona.
La bombera deja huérfanos a dos niños de 10 y 4 años y un vació muy grande en su comunidad de Limpio, de donde era oriunda. Según relatos de otros voluntarios, la joven era una líder comunitaria, que siempre estaba al servicio de sus vecinos.
“Era madre de dos hijos, que ahora se quedaron prácticamente solos porque ella era su sustento. Aparte de una excelente madre, Diana ayudaba en su comunidad. Ayudó con gestiones para conseguir viviendas para sus vecinos Era una líder comunitaria”, resaltó su compañera del cuerpo de bomberos, Andrea Quiñónez.