Casi en el final de la tradicional ceremonia de cada 8 de diciembre, en el marco de la festividad de la Virgen de los Milagros de Caacupé, el Monseñor Ricardo Valenzuela leyó su cuarta carta al pueblo paraguayo, expresando su preocupación respecto a la administración de la Justicia y los poderes del Estado, que incide en la “dinámica cotidiana de cada paraguayo: los pobres, los indígenas, los sin tierra, la droga, el narcotráfico, el uso y abuso de la política”.
“A las autoridades el pueblo como soberano no les ha dado poder para enriqueserce más y más”
El Monseñor Valenzuela criticó duramente a la clase política y recalcó que los administradores estatales necesitan lecciones rápidas de idoneidad y honestidad.
“Que hagan bien lo que tienen que hacer y que administren honestamente los recursos que la gente les confía. Que los administren a favor de la gente, en especial de la más humilde”, resaltó Valenzuela.
El obispo insistió en que las autoridades tienen la misión de resguardar e invertir el dinero público para el bien de los ciudadanos “y sobre todo el de los más necesitados”.
“Nos nos parece prudente hacer préstamos y más préstamos y aprobar, deliberadamente, un presupuesto deficitario”
Valenzuela enfatizó en la preocupación fundamnetal por la “situación y el manejo de la economía. En este sentido, el obispo de Caacupé criticó duramente el nivel “sideral” de enduedamiento público. A la par, se mostró preocupado por la aprobación de un “presupuesto deficitario” , con “más gastos”, “sin tener aún con qué pagar”.
“El panorama sombrío de nuestra economía paunta directamente a la quiebra con toda la consecuencia que se puede derivar….Cada tanto se tiene la idea de endudarse más y más, inclusive para pagar sueldos y aumentos salariales de algún sector de los funcionarios públicos.No estamos en contra de que se pague bien a los trabajadores, pero frente a la precariedad de los recursos estatales, sobre todo en salud, educación, seguridad y justicia. Es necesariocuidar los gastos”, resaltó.
“Nuestra preocupación radica en la propuesta de ‘meter mano’ a los fondos jubilatorios”
El Monseñor Valenzuela lamentó que los constantes intentos de utilizar los fondos jubilatorios “buscando atajos para solucionar de modo imprudente y deshonestos faltantes causados por el mal manejo de la Administración de la República”.
Desde el santuario de Caacupé, el religioso requirió a que no se despoje a los trabajadores de los recursos generados para la jubilación y atención sanitaria. “Los obreros tienen derecho a disfrutar plenamente de la asistencia sanitaria y que reciban su justa jubilación. Nos preguntamos por qué los obreros deben pagar el costo de la mala administración de los gobernantes”.
Renegociación del Anexo C
Valenzuela destacó que la renogocacición del Anexo C del tratado de Itaipú debe estar entre la lista de proridades de este y el gobierno venidero. De esta forma, el obispo cuestionó que este tema se aborde como una cuestión “banal”, mientras unos “cuantos ya saben qué deben hacer, pero nadie conoce si los beneficios serán para la República del Paraguay o una vez más serán solo para unos pocos”.
Asimismo, el Monseñor isntó a la población a no desvíar la atención con “tarifas reducidas” y “descuentos de tres meses”, que coinciden con el calendario electoral. “La cuestión fundamental está en la renegociación reclacó”.
“No queremos fiscales gatillo fácil”
El obispo de Caacupé arremetió contra la corrupción en lo que hace a la administración de la Justicia y reiteró la necesidad de la independencia de la Fiscalía de los “poderes fácticos”, recordando que próximamente se realizará la elección de un nuvo titular para el Ministerio Público.
Valenzuela destacó que el Paraguay no desea fiscales que “imputan sin tener una base seria de un supuesto delito” y que los jueces deben ser honrablñes y respetables, “cuyas senetncias lleven el signo de la legalidad”.
Crimen organizado y secuestros
El Monseñor no se olvidó del asesinato del fiscal Marcelo Pecci y otras víctimas del crimen organizado como Vita Aranda y el exindente de Pedro Juan Caballero José Carlos Acevedo.También recordó la situación en el norte y arremetió duramente el contra el escaso esfuerzo para “rescatar” a Edelio Morínigo, Félix Urbieta y Óscar Denis.
“No debemos perder de vista el deber de hacer. Nosotros los paraguayos, nuestras tareas administrando buena justicia con leyes justas y exigiendo a quienes tienen la responsabilidad de hacerlo”, refirió.
Transformación educativa
Respecto al Plan de Transformación Educativa, el obispo reclacó que la Iglesia se mantiene en su postura de respetar la Constitución Nacional y la Doctrina sobre la vida.
“Debemos reconocer que el sistema educativo es deficiente y necesita una transformación. Pero, eso cambio deberá realizarse sin ideologías que desvirtúan la naturalwza humana.Esa educación debe ser integran y debe responder a toda la realidad del hombre y de la mujer, un proceso educativo que respete la identidad sexual y la cultural del pueblo paraguayo”, mencionó.
Elecciones
Valenzuela también ovasionó en su carta a los atletas que se detacaron en los Juegos Odesur y a Berta Rojas, quien se alzó recientemente con dos Latin Grammy por su disco “Legado”. Además, enlateció al primer cardenal paraguayo, Monseñor Adalberto Martínez, asegurando que su nuevo título responde una larga espera de la comunidad religiosa paraguaya.
Finalmente, el obispo de Caacupé destacó que con la proximidad de las elecciones internas y generales la ciudadanía debe cuestionar a quienes aspiran a ocupar cargos públicos y a quienes buscan ser reelectos: “¿Por qué razón hay tanto afán de ser político? ¿Es muy garnde acaso el deseo de dervir o no se ha vuelto la política un medio ilícito para enriqueserce? Los cristianos están llamados a elegir autoridades que tenga una mínima credibilidad, que sean patriotas”.