Luego de las denuncias de que paraguayos ingresaban a arroyos en el Pantanal brasileño para practicar pesca depredadora, el Comando de la Policía Militar envió a policías de Campo Grande para realizar peritajes e incautar los elementos.
Según informaron medios del vecino país, durante los días santos, los militares realizaron un cerco en los puntos clave donde los connacionales pescarían, a fin de evitar una posible fuga.
En la madrugada del sábado, horario que acostumbraban realizar la actividad ilegal, los equipos de inteligencia se dividieron y cerraron el cerco en los puntos, donde el Sector de Inteligencia logró averiguar que se produciría una pesca ilegal.
Alrededor de las 4:40, los equipos lograron detener a tres paraguayos, en el lugar denominado “Corixo Máquina I”, a aproximadamente 60 km de la ciudad de Porto Murtinho, a lo largo del río Paraguay.
Los connacionales, al ver a los agentes, intentaron escapar y volver a ingresar a territorio paraguayo; no obstante, debido al cerco bien planteado, fueron detenidos con 170 kilos de pesca ilegal.
Los mismos, procedentes de Vallemí, serán sancionados por el delito de pesca depredadora.