La agente fiscal Laura Guillén obtuvo la condena de nueve años de cárcel para un hombre por la comisión del hecho punible de abuso sexual en niños.
La víctima fue su propia hija menor de edad. Según los antecedentes del caso, el hecho ocurrió en el mes de junio del año 2017, cuando la misma tenía tan solo 13 años.
En aquella ocasión, el hombre, en horas de la noche, fue hasta la vivienda de su expareja en la ciudad de Ñemby y, en ausencia de la misma, ingresó a la habitación de su hija para someterla sexualmente a la fuerza.
Posteriormente, el condenado le pidió a la menor que no contara sobre lo ocurrido y que sea un secreto entre ellos dos. Los hechos se repitieron una vez más en la ausencia de la madre, quien se encontraba trabajando.
Según señalaron desde la Fiscalía, el hombre fue hallado culpable de abuso sexual en niños en conformidad a la Ley vigente 3440/2008 al momento del hecho, disposición legal que disponía la pena máxima de 10 años de cárcel, considerado por el Tribunal de Fernando de la Mora como pena justa 9 años.
El Tribunal de Sentencia se encontró conformado por los magistrados Leticia Frachi, Javier Sapena y Liz Ramírez como miembros titulares.