Según López Arce, hay unos 376.000 desempleados jóvenes con menos de 30 años afectados por el desempleo, de un total de 718.000 ciudadanos desempleados. La tasa de desempleo abierto revela que existen tres grupos de desempleados jóvenes en el país.
En primer lugar, están las personas que quieren y buscan de forma activa un empleo, en segundo lugar, los sub ocupados, que trabajaron unas horas y ganaron algo de dinero pero no en el sector que quieren y siguen buscando algo mejor,y por último los inactivos circunstanciales o “desanimados”, personas que sí quieren trabajar, pero no buscan empleo.
Según una encuesta realizada por la organización Acción Paraguay a jóvenes entre 15 y 30 años en Capital y Central, el 85% de los jóvenes quedó sin empleo durante la pandemia, mientras que un 71% de los emprendedores dentro del rango etario registró una disminución en sus ingresos.
En ese sentido, el especialista López Arce refirió que ante el aumento de contagios disminuye el empleo y la oferta del mismo. “De esa cantidad de infectados de 800 a 1.000, minimo un 60 o 70% son personas que salen a la calle a trabajar, eso significa que hay menor productividad”, explicó.
Agregó que ante el riesgo a la salud de las personas, hay gastos de las empresas en fumigacion que derivan en recortes de personal y hay empresas que cierran, lo que deja ver que el empleo se encuentra muy golpeado.
Por su parte, la encuesta de Acción Paraguay detalla que solo el 29% de los trabajadores jóvenes logró acceder a un subsidio estatal y el 4% a créditos bancarios.
Con estos números, queda claro que la juventud no solo está en crisis debido al aislamiento por la pandemia, sino también hay una crisis de desempleo que el sector viene arrastrando desde antes de las medidas de cuarentena sanitaria.
