En su habitual conferencia para actualizar la situación de la pandemia del Covid-19 en Paraguay, el ministro de Salud, Julio Mazzoleni, mencionó cómo se encuentra el sistema sanitario para dar respuesta a este mal.
Primeramente, recalcó que no hay ningún sistema de salud en el mundo que haya estado preparado y que pudiera con la propagación de la enfermedad. No obstante, sostuvo que siguen con la adquisición de insumos, equipos de bioseguridad y la ampliación de las camas. Detalló que el sistema tiene aproximadamente un 75% de ocupación, lo que va variando con el incremento de camas.
Precisamente, en cuanto a las camas, informó que actualmente el país cuenta con unas 509 para terapia intensiva, de las cuales 335 son para adultos, 75 son pediátricas y 99 para neonatales. Mazzoleni afirmó que si bien esto seguirá incrementándose de manera persistente con el correr de los días, “es muy poco inteligente pensar que eso nos podrá salvar”, haciendo hincapié en que la lucha debe darse fuera de los hospitales.
En cuanto a los equipos, detalló que han adquirido 36 respiradores más y 30 incubadoras y que seguirán recepcionando otros en los próximos días. Comentó que son compras realizadas por el Ministerio de Salud y que ni bien son recibidas, son enviadas a los hospitales que requieren.
El objetivo principal del Ministerio de Salud es estabilizar el número de casos que se tienen actualmente y frenar la curva ascendente, llegando a una meseta.
En cuanto a los testeos, sostuvo que los rastreos se siguen realizando y que a medida que pasan los días, van acortando la brecha existente con la toma de muestras. Es más, aseguró que actualmente “Paraguay es el segundo país que hace más testeos por cada caso positivo”. Expresó que hay un esfuerzo y que esto se debe mantener, con ayuda de toda la ciudadanía, aplicando todas las medidas sanitarias.
Mazzoleni comparó a nuestro país con varios otros, especialmente de Europa, con respecto a la tasa de mortalidad, que definió como el indicador más duro y que no se puede modificar. Mencionó que el actual indicador es de 2,3 por cada 100.000 habitantes en Paraguay.
Recalcó que “Paraguay tiene que pensar en sí mismo y al final de la pandemia encontrarse con la menor cantidad de fallecidos“.
